MINI MASCULINO 2005
Nuestro equipo mini masculino disputó el torneo de Sondika, el que fue el primero de muchos para este equipo que afronta su segunda temporada con muchas ganas de seguir aprendiendo.
Se jugaron cuatro partidos entre el viernes y el domingo. El primer rival fue BSK Basauri al que se ganó por 5-56 dando muestras de que se llegaba al torneo con ganas de hacer algo bonito. En la jornada del sábado, se jugó una eliminatoria a ida y vuelta frente a Balmaseda. El partido de la mañana, se lo llevaron nuestros peques in extremis por 41-31 tras un gran último periodo. Se empezaba a vislumbrar el gran resultado que se conseguiría al final del torneo. Por la tarde, se aparcaron los nervios que afloraron durante muchos minutos del partido de la mañana. Una gran defensa hizo que estos pequeños guerreros consiguiesen vencer por 45-19 y con ello pasar a la final del torneo. Algo con lo que no se contaba. Se había conseguido lo más difícil, a partir de este momento sólo quedaba disfrutar.
Y así fue, como me dijo Andoni, entrenador del cadete y junior masculino de Patronato Maristas «Las finales están para disfrutarlas, no para sufrirlas». Los jugadores aprovecharon al máximo la experiencia de jugar una final ante un gran equipo como Tabirako. Y pese a la derrota, durante muchos minutos del partido se jugó de tú a tú, sin miedo, valientes y con ganas de comerse el aro. No se pudo culminar el torneo poniendo la guinda al pastel, pero nos quedaríamos en la espuma del mar si valorásemos el gran fin de semana en un subcampeonato, una copa y una medalla. Afortunadamente, lo que hemos ganado va mucho más allá de lo material. Las recompensas intrínsecas son las que realmente merecen la pena. Durante el torneo, hemos hecho más duro si cabe, el grupo, el equipo. Hemos reído, hemos animado, hemos disfrutado del ataque, nos hemos vaciado defendiendo y sobre todo, nos hemos divertido jugando a baloncesto. Como señores, respetuosos ante todo y ante todos. Cada día mejores deportistas y mejores personas. ¿Podemos pedirles más a estos monstruos de 10 y 11 años? No olvidemos que son niños. La prueba de ello, y uno de los momentos destacables del torneo, fue cuando minutos antes de empezar el calentamiento de las semifinales, los jugadores se sentaron en un corro y estuvieron contándose chistes. Se lo pasaron bien dentro y fuera de la cancha.
Dimos carpetazo al torneo con una medalla al cuello y dedicándole una copa a Gabi Gangoiti. Fue su hijo Jon el elegido por unanimidad en el equipo para alzarla al aire. Seguro que lo vio allá donde esté. Todos los triunfos de esta temporada irán en honor a este integrante de la gran familia que han formado jugadores y aitas, y al que echamos de menos.
Enhorabuena chicos, os merecíais algo así tras haber empezado a entrenar antes de lo debido. Vuestro trabajo, compromiso e ilusión siempre será motivo de celebración, si además es con medalla, más todavía. Mucho ánimo para esta temporada tan ilusionante que tenemos por delante. Y recordar, que nadie os diga que no podéis hacer algo. Seguid soñando, que la vida es más bonita desde esa perspectiva.